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Aun estaba arriba de ese chico que la
seguía viendo con esos ojos verdes que la estaban matando, algo raro
le estaba pasando adentro de ella se sentía rara, aunque no lo podía
ver a través de la oscuridad sabia que debería tener unos labios,
que le encantaría probar, el le sonrío y Rocio reacciono, se
levanto de arriba de el y lo ayudo a levantarse, al levantarse
quedaron a milímetros de distancia, el se separo y la ayudo a
regresar a su cabaña atravez de la oscuridad no dijeron nada en todo
el camino, al llegar a la cabaña de Rocio el entro junto a ella.
Mientras Rocio se cubría con una
manta, el fue hasta la cocina y preparo dos tazas de café, al
regresar al salón y ver a Rocio tapado con la manta sola, esa cara,
esos rasgos le parecían familiares como que si la conociera de años,
sabia que era la nieta el señor Igarzabal pero esa cara le hacia
familiar como que la conocía de chiquitos, se acerco a su lado se
sentó junto a ella enfrente de ese hogar a leña.
Xxx: Hay que tener cuidado, el bosque
de noche puede ser peligroso – dándole su taza de café – un
poco de café para que entres en calor
Rochi: Gracias – tomando un sorbo de
su café – no me has dicho tu nombre
Xxx: Perdón – riéndose – mi
nombre es Gaston Dalmau, vos debes ser Rocio Igarzabal ¿no?
Rochi: Si
Gas: Sabia que vendrías, mi padre me
dijo que la nieta de Don Ignacio Igarzabal iba a venir a esta cabaña
– mirando el fuego – es raro ver a una chica así, digo así de
ciudad, venir a una cabaña en medio del bosque, y teniendo un pueblo
recién a 5km
Rochi: Si, lo que pasa es que es lo
único que me dejo mi abuelo – recordando su niñes – es que la
mayoría de mi vida lo viví acá, tengo muchos recuerdos hermosos
Gas: Se nota – volvió sus ojos a la
cara de ella – sabes que me pareces muy conocida
Rochi: A mi también – le sonríe y
el le devuelve la sonrisa – gracias por ayudarme a volver
Gas: De nada – se levanta – bueno
yo mejor me voy, si necesitas algo estoy en la casa de frente
Rochi: No había visto tu casa al
llegar – se levanto junto a el – Gracias de nuevo
Gas: De nada y si necesitas algo sabes
donde encontrarme
Rochi lo veía irse por ese lugar, unos
recuerdos le llegaron a su memoria, y de vuelta se volvió a formular
la misma pregunta desde que lo veo “¿de donde lo conozco?”
sentía el presentimiento que lo conocía de antes.
Gaston no podía creer, no se imaginaba
que la nieta de Ignacio, era su primera novia en esa época de niños
con apenas 10 años, era ella el estaba seguro, iba hacer cualquier
cosa por tratar de enamorarla y volver a vivir esos momentos de
cuando eran niños, pero con algunas cosas nuevas, volver a ese viejo
amor de la infancia
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